De esta semana me voy con dos satisfacciones:
- la primera (y que da título a la entrada): que por mucho que me canse siempre disfruto como un enano cuando trabajo con chavales; y cuando no me acuerde de porqué lo hago, no tengo más que mirar los post-it de agradecimiento que los mismos niños escribieron sobre mi.
- y la segunda: por fin he conocido (en persona) a Noemí de Mundos Paralelos, pues ella era una de las profes del viaje. Mensaje personal: Siento no haber charrado mucho más contigo y aunque estoy contento, creo que aún nos faltan muchos cafés/helados/granizados/... para ponernos al día.
Muchas gracias.
P.D. Siento no actualizar más a menudo, a ver si ahora en veranico me aplico el cuento y os aburro más a vosotros escribiendo un poco más a menudo.